"No hay sociedades idénticas, no hay países que sean mejores que otros, ni religiones que sirvan para conquistar verdades. Si sólo intentáramos comprender que nuestra vida es tan efímera como un copo de nieve, quizás entonces, después de haber conquistado la belleza, podríamos permanecer serenos hasta la posteridad."


Orhan Pamuk


miércoles, 4 de febrero de 2015

Recordando el caso de Anna Raymi. La española moribunda a la que el consulado de España abandonó a su suerte en Estambul. 2O MINUTOS



Anna Raymi en el hospital tras días de terapia. Foto: Jonkepa.worldpress.com



Léelo en 20 minutos pinchando AQUÍ


R. QUEIMALIÑOS. 28.07.2009 - 02:22h 



La joven catalana Anna Raymi denunciará en el juzgado el "abandono y la indiferencia" con la que fue tratada por el consulado español en Estambul (Turquía) después de que le negase la asistencia tras enfermar en el país euroasiático. La pesadilla coincidió con su aterrizaje en Turquía el pasado 17 de julio para disfrutar de una semana de vacaciones. Anna se sintió indispuesta, fue ingresada de urgencia en un hospital público de Estambul y los médicos le diagnosticaron diabetes aguda. Me negaron atención psicológica y monetaria Los facultativos le recomendaron contactar con el consulado para solicitar asesoramiento legal y económico -en principio le dijeron que el tratamiento ascendía a 1.500 euros- y Anna telefoneó a la legación: "Me negaron atención psicológica, monetaria, se desentendieron de mí y me hicieron sentir como si intentase aprovecharme del Estado". Los funcionarios rechazaron adelantar el dinero de los gastos hospitalarios o de la repatriación a pesar de que su estado de salud era muy delicado -según los facultativos- y la página web del Ministerio de Asuntos Exteriores informa de que "en caso de enfermedad repentina [...] el consulado prestará asistencia" y, "en casos excepcionales [...] se adelantará ayuda económica de carácter reintegrable". El intérprete, de vacaciones En última instancia, Anna solicitó los servicios de un intérprete para que le tradujesen los tecnicismos de su diagnóstico -porque el equipo médico no hablabla inglés- y la respuesta también fue negativa. "Me dijeron que las traducciones se pagaban, que habían subido de precio y que la intérprete estaba de vacaciones". Los funcionarios le notificaron que la única ayuda que le podían ofrecer era contactar con su seguro e informar de su enfermedad para que la compañía se hiciese cargo de la situación. Sin embargo, el consulado "olvidó" llamar a Rumanía -Anna trabajaba hasta entonces para la UE en ese país centroeuropeo- y fue ella quien tuvo que coordinar desde el hospital el protocolo de actuación. Su seguro trasladó a Estambul a una enfermera y Anna fue repatriada tras cinco días ingresada Su seguro trasladó a Estambul a una enfermera desde París y el jueves 23, tras cinco días ingresada, la repatriaron en primera clase desde Estambul a un hospital de Granollers (Barcelona). Ahora Anna se recupera en su casa y asimila la enfermedad. Una información que ignora el equipo de la legación, porque nadie se ha puesto en contacto con ella para interesarse por su salud. El cónsul rechazó este lunes hacer declaraciones a 20 minutos. Acción conjunta contra la legación Los ciudadanos españoles residentes en Estambul preparan un comunicado conjunto para denunciar la situación "de desamparo" que se vive en la ciudad turca y remitirlo a Asuntos Exteriores. "La sensación de abandono es constante y ya es hora de que se sepa en el Ministerio", explica Lucas Farioli, periodista español que vive en Estambul y que confirma el malestar de los compatriotas. "El caso de Anna no es aislado, es el más grave, pero no el único", puntualiza.

Ver más en: http://www.20minutos.es/noticia/487769/0/consulado/enferma/turquia/#xtor=AD-15&xts=467263

viernes, 28 de noviembre de 2014

Istanbul on the foreign eye









ISTANBUL ON THE FOREIGN EYE

Inspiration, enjoyment, passion, mess, love, hate, problems, people, naivety... among many other terms and adjectives that would never be enough to describe in barely ten minutes what goes through the heads of the foreigners living in the, colourful, exotic and always addictive Istanbul... 
We explore the feelings from differently aged random foreigners from countries such as: Canada, Austria, Iran, Britain, Finland and Sweden... We will analyze the feelings of a bunch of foreigners from the perspective of teachers, students, social workers, artists, and architects. And understand how their clean look adopts different angles of vision at the face of a completely different world. 
This video is presented as my own perception of the town and its people... However this is how I pay homage to the beautiful city I live in; I do so through the words of those going through the same experiences Im living now. 
The concept of this project is simply to compose a descriptive, dynamic and humble material in order to portrait how Istanbul taste on a foreign eye.


ESTAMBUL AL OJO FORÁNEO

Inspiración, placer, pasión, desorden, amor, odio gente, inocencia. Entre muchos otros términos y adjetivos que nunca serán suficientes para describir en diez cortos minutos que es lo que pasa por las cabezas de los extranjeros que pueblan las calles de la colorida, exótica y siempre adictiva Estambul
Exploramos así los sentimientos de distintos extranjeros , de diferentes edades que vienen de países como: Canadá, Austria, Irán, Reino Unido, Finlandia, y Suecia. Escuchamos desde la perspectiva de: profesores, trabajadores sociales, artistas, arquitectos, como a través su mirada limpia, forman diferentes percepciones al enfrentar un mundo completamente nuevo.
Este video se presenta como mi propio ángulo sobre la ciudad y sus gentes. Rindo homenaje así, a través de las palabras de aquellos que experimentan las mismas vivencias. La idea es simplemente componer un material descriptivo, dinámico y humilde con el que retratar cómo sabe Estambul al ojo foráneo.

jueves, 25 de septiembre de 2014

Navegando entre dos mundos (Pagina/12 Argentina)



Ale Haddad en el año 2013 en el ferry estambulí que comunica Europa con Asia




Lucas Farioli / Estambul


Léelo en Página/12 pinchando AQUÍ



Argentina y Turquía son dos países indistintamente dispares y al mismo tiempo íntimamente ligados. El hecho de que se sitúen en diferentes continentes, hablen distintos idiomas, y profesen distintas religiones consagran las diferencias más acusadas. Sin embargo, ambos comparten una historia común de represión, desaparecidos y finalmente el arduo camino por la lucha por la justicia y el reconocimiento.
Lo sabía bien Alejandro Haddad, periodista y documentalista argentino de origen sirio-libanés, irremediablemente enamorado de Turquía y sus idiosincrasias: Ale, como le llamaban sus amigos, poseía un talento especial para retratar desde el lenguaje narrativo los dilemas humanos. En una búsqueda de respuestas y quizás de sus propias raíces, se embarcó en 2013 junto con su amigo Nicolás Valentini en su proyecto más ambicioso: Pañuelos para la Historia, un documental que narra el viaje de Nora Cortiñas (Madres de Plaza de Mayo-Línea Fundadora) al Kurdistán turco para visitar a las madres de los kurdos muertos y desaparecidos por el Estado turco.
Ale arrastraba una enfermedad muy difícil que nunca le impidió seguir escupiendo verdades. Aún con las dificultades propias de su padecimiento llegó a Estambul con Nora y Nicolás para reunirse en la vigilia de las Madres de los Sábados (madres kurdas que protestan en silencio en la avenida Istiklal por sus hijos desaparecidos). Grabó cada segundo de aquellos momentos y prosiguió su periplo hacia Diyarbakir, epicentro del Kurdistán turco. Llegaron el día del Nawroz (Año Nuevo kurdo, y símbolo de la resistencia de este pueblo) y no perdieron detalles de las masivas celebraciones. Desde allí, partieron con Nora y un grupo de las Madres Kurdas por la Paz (organización de madres de desaparecidos kurdos) a la capital, Ankara, para pedirle mediante una misiva al gobierno turco y a la representación de las Naciones Unidas que se impliquen genuinamente en la búsqueda de una solución pacífica a un conflicto que se ha cobrado más de 35.000 muertes en los últimos treinta años. No fueron bienvenidos pero la policía no se atrevió a actuar. La cámara de Ale era su mejor arma de disuasión. Los funcionarios de la ONU tuvieron que recibir a las madres en la calle y aceptar la misiva. Aquello quedó registrado para la historia.
Para Ale la búsqueda de justicia nunca entendió de idiomas, religiones o fronteras. Por ello se consagró en difundir la causa kurda en la Argentina, darles voz a los que no la tienen y explicar que aquella sangrienta disyuntiva existe aunque no la veamos, aunque no nos lo cuenten. Hoy sí, Ale ha perdido la batalla contra su enfermedad. Se nos va para siempre un excelente periodista, un poeta, un amigo, un hombre hambriento de justicia. A Ale hoy lo llora el Kurdistán y hoy más que nunca lo lloramos los que creemos en la justicia universal.

domingo, 22 de septiembre de 2013

Protestas en Estambul

Estambul 2013

Esto es lo que se ve detrás de las cámaras. Los periodistas a veces nos convertimos en objetivos y nos acercamos al peligro al situarnos entre manifestantes, a veces violentos y las fuerzas policiales que no hacen distinción. Aquí en Turquía, los informadores extranjeros somos tildados de amenaza y de servir los intereses de potencias extranjeras aún cuando algunos medios se sitúan al otro lado del espectro mediático. Por ello somos nosotros un objetivo mas de la policía que a menudo intenta evitar que mostremos la cruda realidad de la represión que se vive en esta nación donde las libertades esenciales democráticas se muestran cada vez más ausentes.
Estas sencillas imágenes ilustran lo que es un simple día de trabajo, unos meros instantes de absoluta cotidianidad que cualquier periodistas enfrentaría en su empeño por realizar su labor informativa.